Intel tiene un serio problema encima. Básicamente todos los micros fabricados durante la última década tienen un fallo de seguridad marca ACME.
El fallo de seguridad implica que cualquier programa podría acceder a espacio de memoria reservado para el Kernel, lo que descubriria información sensible en el equipo afectado. Lo mas preocupante de todo es que cualquier script podría hacerse de esto, vaya, hasta un simple JavaScript corriendo en el navegador.
Ya se han preparado parches para este fallo en sistemas operativos libre como Linux, donde se hace un aislamiento de las paginas reservadas para el Kernel, sin embargo esta técnica representa una perdida de rendimiento de hasta un 35% en el micro.
Tambien se ha reportado que en Microsoft Windows ya se esta buscando la implementación del parche de seguridad, aunque no se ha dicho cuando se liberará ni en que medida afectará al sistema.
Se cree que para el usuario casero el rendimiento no se percibirá tanto pues generalmente no representan una gran carga para el CPU. Sin embargo los profesionales que hacen un uso intensivo del CPU (editores de video, por ejemplo) y sobre todo, servidores o infraestructura “en la nube” si podría ver afectado en gran medida su rendimiento, siendo los principales afectados Amazon y Google.
Esperemos a ver en que forma Intel y los gigantes detrás de las diferentes plataformas solucionan este problemón.